
¡Qué sensación de tranquilidad!¿Verdad Roberto?.
Al solecito con tu cerveza, dejando que pase el tiempo sin prisa, sin mirar al reloj... porque hoy... tienes todo el tiempo del mundo para hacer "nada". Nada en esta plaza de Faro, tan concurrida en el día y tan oscura y solitaria en la noche. Nada y sin reloj.